Factores de riesgo y prevención


DATOS Y CIFRAS VIH / SIDA

ESTADÍSTICAS MUNDIALES SOBRE EL VIH DE 2017

 

36,9 millones [31,1 millones–43,9 millones] de personas vivían con el VIH en 2017 en todo el mundo.

21,7 millones [19,1 millones–22,6 millones] de personas tenían acceso a la terapia antirretrovírica en 2017.

1,8 millones [1,4 millones–2,4 millones] de personas contrajeron la infección por el VIH en 2017.

940.000 [670.000–1,3 millones] personas fallecieron a causa de enfermedades relacionadas con el sida en 2017.

77,3 millones [59,9 millones–100 millones] de personas contrajeron la infección por el VIH desde el comienzo de la epidemia.

35,4 millones [25,0 millones–49,9 millones] de personas fallecieron a causa de enfermedades relacionadas con el sida desde el comienzo de la epidemia.

 

 

 


Personas que viven con el VIH

 

En 2017, 36,9 millones [31,1 millones–43,9 millones] de personas vivían con el VIH.

35,1 millones [29,6 millones–41,7 millones] adultos.

1,8 millones [1,3 millones–2,4 millones] niños (menores de 15 años).

En 2017, el 75% [55–92%] de las personas que vivían con el VIH conocía su estado serológico con respecto al VIH.

Alrededor de 9.4 millones de personas no sabian que vivían con el VIH

 

Personas que viven con el VIH con acceso a la terapia antirretrovírica

En 2017, 21,7 millones [19,1 millones–22,6 millones] de personas que vivían con el VIH tenían acceso a la terapia antirretrovírica, un aumento de 2,3 millones desde 2016 y con relación a los 8 millones [7,1 millones–8,3 millones] de 2010.

En 2017, el 59% [44–73%] de las personas que vivían con el VIH tuvieron acceso al tratamiento.

El 59% [44–73%] de los adultos mayores de 15 años que vivían con el VIH tuvieron acceso al tratamiento, así como el 52% [37–70%] de los niños de hasta 14 años.

El 65% [49-80%] de las mujeres adultas mayores de 15 años y el 53% [38-66%] de los hombres adultos mayores de 15 años tuvieron acceso a tratamiento.

En 2017, el 80% [61– >95%] de las mujeres embarazadas que vivían con el VIH tuvieron acceso a medicamentos antirretrovíricos para evitar la transmisión del VIH a sus hijos.

 

Nuevas infecciones por el VIH

Desde el pico alcanzado en 1996, las nuevas infecciones por el VIH se han reducido en un 47%.

En 2017, se produjeron 1,8 millones [1,4 millones–2,4 millones] de nuevas infecciones por el VIH, en comparación con los 3,4 millones [2,6 millones–4,4 millones] de 1996.

Desde 2010, las nuevas infecciones por el VIH en adultos descendieron alrededor de un 16%, desde 1,9 millones [1,5 millones–2,5 millones] hasta 1,6 millones [1,3 millones–2,1 millones] en 2017.

Desde 2010, las nuevas infecciones por el VIH en niños descendieron un 35%, desde 270.000 [170.000–400.000] en 2010 hasta 180.000 [110.000–260.000] en 2017.

 

Muertes relacionadas con el sida

Desde el pico alcanzado en 2004, los casos de muertes relacionadas con el sida se han reducido en más de un 51%.

En 2017, fallecieron 940.000 [670.000–1,3 millones] personas en todo el mundo a causa de enfermedades relacionadas con el sida, frente a los 1,9 millones [1,4 millones–2,7 millones] de 2004 y los 1,4 millones [1 millón–2 millones] de 2010.

 

90-90-90

En 2017, tres de cada cuatro personas que vivían con el VIH (75%) conocían su estado.

Entre las personas que conocían su estado, cuatro de cada cinco (79%) tenían acceso al tratamiento.

Y, entre las personas que tenían acceso al tratamiento, cuatro de cada cinco (81%) habían logrado la supresión viral.

El 47% de toda la gente que vive con el VIH tiene una carga viral indetectable.

 

Mujeres

Cada semana, alrededor de 7.000 mujeres jóvenes de entre 15 y 24 años contraen la infección por el VIH.

En África Subsahariana, tres de cada cuatro infecciones nuevas afectan a las adolescentes de entre 15 y 19 años. Las mujeres jóvenes de entre 15 y 24 años tienen el doble de probabilidades de vivir con el VIH que los hombres.

Más de un tercio (35%) de las mujeres de todo el mundo ha sufrido violencia física o sexual en algún momento de su vida.

En algunas regiones, las mujeres que son víctimas de la violencia tienen un 50% más de probabilidades de contraer la infección por el VIH.

 

Grupos de población clave

Los grupos de población clave y sus parejas sexuales representan:

El 47% de las infecciones nuevas por el VIH a nivel mundial.

El 95% de las infecciones nuevas por el VIH en Europa Oriental y Asia Central, y el Oriente Medio y África Septentrional.

El 16% de las infecciones nuevas por el VIH en África Oriental y Meridional.

El riesgo de contraer el VIH es: 

27 veces mayor entre los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres.

23 veces mayor entre las personas que se inyectan drogas.

13 veces mayor para las trabajadoras sexuales.

13 veces mayor para las mujeres transgénero.

 

El VIH y la tuberculosis

La tuberculosis continúa siendo la principal causa de muerte entre las personas que viven con el VIH, siendo responsable de aproximadamente una de cada tres muertes relacionadas con el sida.

En 2016, 10,4 millones de personas desarrollaron tuberculosis, de las cuales 1,2 millones vivían con el VIH.

Las personas que viven con el VIH y no presentan síntomas de tuberculosis necesitan la terapia preventiva contra la tuberculosis, que disminuye el riesgo de desarrollar dicha enfermedad y reduce las tasas de mortalidad de la tuberculosis y el VIH en un 40% aproximadamente.

Se estima que el 49% de las personas que viven con el VIH y la tuberculosis desconocen su coinfección y, por lo tanto, no reciben atención.

 

Fuente: Onusida http://www.unaids.org/es/resources/fact-sheet

 

Nota descriptiva N°360 - Noviembre de 2015

 

El VIH sigue siendo un importante problema de salud pública mundial, después de haberse cobrado más de 34 millones de vidas hasta ahora. En 2014, 1,2 [980 000-1,6] millones de personas fallecieron a causa del VIH en todo el mundo.

 

A finales de 2014 había 36,9 [34,3-41,4] millones de personas infectadas por el VIH en todo el mundo, de los cuales 2 [1,9-2,2] millones de personas contrajeron el HIV en 2014.

 

El África subsahariana, donde había 25,8 [24-28,7] millones de personas infectadas por el VIH en 2014, es la región más afectada. Casi el 70% del total mundial de nuevas infecciones por VIH se registra en esta región.

 

 

La infección por el VIH se suele diagnosticar mediante análisis de sangre en los que se detecta la presencia o ausencia de anticuerpos contra el virus. En general los resultados de estas pruebas están disponibles el mismo día de su realización, hecho esencial para el diagnóstico, el tratamiento y la atención precoces.

No hay cura para la infección por el VIH, pero los fármacos antirretrovíricos eficaces pueden controlar el virus y ayudar a prevenir su transmisión, de modo que las personas con VIH o alto riesgo de contraerlo pueden disfrutar de una vida saludable y productiva.

 

Se calcula que solo el 54% de las personas con VIH conocen su estado serológico. En 2014, aproximadamente 150 millones de niños y adultos de 129 países de ingresos bajos y medios se beneficiaron de la realización de pruebas de detección del VIH.

A mediados de 2015 había 15,8 millones de personas infectadas por el VIH que recibían terapia antirretrovírica en todo el mundo.

 

Entre 2000 y 2015 las nuevas infecciones por el VIH han disminuido en un 35%, y las muertes relacionadas con el sida en un 24%, lo cual significa 7,8 millones de vidas humanas salvadas gracias a los esfuerzos internacionales que llevaron a la consecución mundial de las metas de los Objetivos de Desarrollo del Milenio relacionadas con el VIH.

 

La ampliación del tratamiento antirretrovírico a todas las personas con VIH y el aumento de las opciones preventivas podrían ayudar a evitar 21 millones de muertes relacionadas con el sida y 28 millones de nuevas infecciones para 2030.

 

Fuente: OMS. http://www.who.int/mediacentre/factsheets/fs360/es/

 

 


FACTORES DE RIESGO

 

Hay ciertos comportamientos y afecciones que incrementan el riesgo de que una persona contraiga el VIH, entre ellos:

 

Practicar  coito anal o vaginal sin protección

Padecer  alguna otra infección de transmisión sexual como sífilis, herpes, clamidiasis, gonorrea o vaginosis bacteriana

Compartir  agujas o jeringuillas contaminadas, soluciones de droga u otro material infeccioso para consumir drogas inyectables

Recibir  inyecciones o transfusiones sanguíneas sin garantías de seguridad o ser objeto de procedimientos médicos que entrañen corte o perforación con instrumental no esterilizado

Pincharse  accidentalmente con una aguja infectada, lesión que afecta en particular al personal sanitario

 

 

Fuente: OMS. http://www.who.int/mediacentre/factsheets/fs360/es/

·         



TRATAMIENTO

 

El VIH se puede combatir mediante una politerapia que comprenda tres o más antirretrovíricos. Aunque no cura la infección por VIH, este tipo de tratamiento controla la replicación del virus dentro del organismo del sujeto y contribuye a fortalecer su sistema inmunitario, restableciendo así su capacidad para combatir infecciones.

 

En 2015 la OMS publicó el documento titulado Directrices sobre cuándo iniciar el tratamiento antirretrovírico y sobre la profilaxis del VIH antes de la exposición, en el que recomienda que, una vez diagnosticada, toda persona infectada por el VIH inicie el tratamiento antirretrovírico lo antes posible.

 

A mediados de 2015, en el mundo había 15,8 millones de personas con VIH que estaban recibiendo tratamiento antirretrovírico. A finales de 2014, el 40% [37–45%] de la totalidad de las personas con VIH estaban en tratamiento antirretrovírico.

 

Las nuevas recomendaciones de la OMS —tratar a todas las personas con VIH y ofrecer antirretrovíricos como alternativa preventiva adicional a las personas con un riesgo considerable— incrementará de 28 a 37 millones el número de candidatos al tratamiento antirretrovírico. La ampliación del acceso al tratamiento está en el centro de una nueva serie de metas para 2020 que tienen por objetivo acabar con la epidemia de sida en 2030.

 

Fuente: OMS. http://www.who.int/mediacentre/factsheets/fs360/es/


Quiénes Somos 

Un espacio que  busca brindar información sobre sexualidad y  VIH